El riesgo de infección para el ser humano depende de un conjunto de condiciones:
La penetración de la bacteria en el circuito de agua.
La multiplicación de dicha bacteria en el agua, siendo el rango de la temperatura idónea para su desarrollo de 20°C a 50°C y su temperatura óptima de desarrollo 37°C.
La dispersión del agua contaminada con las bacterias en el aire.